lunes, 30 de julio de 2007


Abro el correo a primera hora de la mañana. Dos bellos amigos me han enviado sendos poemas, uno de Hafiz, persa, antiquísimo, y otro, "Casandra", de Gabriela Mistral. Levantan una mañana que requiere de salir de sí, perderse en el mundo, como sea. Los dos poemas son hermosos, nubes que coronan la cima de alguna montaña.

Entro a tambor batiente en la vorágine de las palabras, como quien huye de un mal sueño. Las palabras arrullan, cantan, vuelven el mundo a su lugar. Oigo aquellas palabras que he recogido en el último tiempo, oigo su melodía y el mundo que traen a la mano. "Arúspice", "peplo", "hieródula", cada una con su canción. Incluso palabras de otra lengua: "hotaru", la palabra japonesa para decir luciérnaga.

Después, el día. Por suerte, como no, viene cargado. Mañana también. Y pasado. Las palabras se cuelan por las rendijas de los agitados días, marcas de la eternidad en lo cotidiano. Me gustaría saber orar: creo que es un buen momento. Caer en éxtasis. Clamar al cielo.

Pero los días son agitados y la marea de la existencia tiene una rompiente agitada. En fin. Casandra. Hafiz. Algo se avizora, en todo caso: estoy convidado el miércoles en la noche a la declamación de los poemas de un poeta griego contemporáneo, primero en griego, luego en español. Ojalá encuentre ahí alguna nueva palabra, para la cima de otra montaña. Hace falta.







Por cierto, encontré esto, el canto 19 de "Hespérides":



Mas Allá De Tus Ojos.



Cuando todo haya pasado
y nos encontremos de nuevo
frente a un fogón encendido
convertidos ambos en ceniza
y ni huesos blanqueados queden
y ni sombras hayan en los ojos
y no pueda tocarte ni mirarte
aún allí serás mi silencio.

14 comentarios:

chica canifru dijo...

Hay veces que también me hace falta algún empujón para poder empezar y seguir, esas letras que aunque se escribieron hace mucho ejercen un tremendo poder en uno.

No recuerdo tu blog anterior, no me caracterizo por una buena memoria, pero es bueno saber que alguien te sigue las letras.

Claudia Corazón Feliz dijo...

Puta doc, que gueno que lo encuentro! Caché por el último comentario que le dejaste a mi hermana que ahora cambiaste de blog, a este repiola. Yo le cuento a ella quien eres.

Saludos.

Megumi-san dijo...

Uff de verdad que hay escritos que te alegran la vida y te ponen de muy buen humor, te sacan de esa realidad asfixiante y te ayudan a superar los impaces....

Cómo me encantaría que me dedicaran ese verso, esta excelente...

Camino del sur Pilar Obreque B dijo...

Qe palabras hay que dedicarle tiempo, bonito poema de amor eterno

Coloco a modo de contrapunto unos antiguos versos escuchados a mi padre :

"Cuando vayas en busca de mi cruz al campo santo, la encontraras en un rincón humilde de flores rodeadas por un manto, de las que hayan en mi pecho florecido, para tu blonda cabellera solo elige, los versos que escribir no supe, las palabras de amor que no te dije"
no conozco su autor

Abrazos

Bicho

luciérnaga dijo...

No es primera vez que leo este
canto 19, y en cada ocasión me
hace temblar el alma. Es hermo-
sísimo.
Un abrazo.

L.

Anónimo dijo...

¿Hablas así todo el tiempo? ¿Y cómo haces para pedir la hora?..espera, déjame adivinar: "Disculpad, acémila de cronos, poned vuestras palmas de cara al suelo y recitadme las cordenadas temporales que prominente sol demanda, pues abrigo el silente deseo de arrivar con las gaviotas del acierto al vasto puerto del cenit...no omitais los segundos, buen hombre, pues tenerlo pequeño no significa que no podáis eyacular..." ¿le atiné?...je; disculpa el desvario pero vengo con 40 de temperatura y no estoy muy razonable esta mañana.

v dijo...

Querido M: las palabras son bellas por su sonido, aunque hay formas de arruinar hasta las más bellas. Personalmente, las palabras susurradas me gustan más que nada, porque es como si su música se desplegara en una partitura distinta. Una música que además de encantar, calma. Cosa que le vendría bien en estos agitados días. Ojalá alguno de los poemas que va a escuchar esta noche pueda agenciárselos en susurros. Se va a acordar de mi

0º Latitud Sur dijo...

Profe (ve, si no hay caso,viene solita, no puedo detenerla)
Yo también le quiero regalar unas palabras de amor desde una voz tan sencilla que desde niña me hace temblar. Espero me permita ofrendárselas por un ratito... aquí voy (uy....qué susto)
Te voy a regalar
bolitas de cristal
una hojita de otoño y la mitad de un pan...
Te voy regalar
un barco de papel
un palitroque verde y la rueda de un tren.
Para la navidad yo te voy a contar
un hermoso secreto del viejo pascual...
Te prometo también...
no ver televisión
escribirte un poema y darte una canción.
Te quiero sólo a ti
y a nadie más...
... pero ya se lo he dicho a papá y mamá...
"Canción de Amor para Gabriela" de los Zapallo (adoro el zapallo, sobre todo con azúcar en invierno en mi plato hondo, yo acostada en mis sabanas de saco harinero y el borde de un generito suave, con niñitas durmiendo en sus camitas de colchas hechas de parche.... cómo yo, cómo las que mi mamá hacía para mí... ¿dónde se abran quedado esas sábanas?...cómo quisiera tenerlas ahora...cómo quisiera tenerlas para siempre...)

Pili dijo...

Hola Mahiafeff, gracias por invitarme a tu blog...lo he disfrutado mucho, aunque por ahora mi inhibición es máxima para hacer cualquier comentario respecto a tus escritos. Me conseguí la película y te la haré llegar en algún momento.
Cariños

Pili dijo...

Sorry...Mahiakeff escribí mal tu nombre ¿qué significa o es privado?

Pedrugo dijo...

Una vez más, el amor por la palabra sale ganando con su blog, mi querido amigo.

Que el espíritu de los viejos poetas de la antigüedad se regocije en su nombre.

mahiakeff dijo...

Chica: je... Furiosilla es una gran fisonomista. Un abrazo.

Furiosa: siempre trascurría. Siempre. A vuestros pies.

Megumi-San: Haberlo dicho antes...

Bichito: ¡que lindo!! Sea de quien sea, que lindo...

Luciérnaga: fumando espero, ta ta ta tatá....

Nicotine: desvaríos de Melanie Klein quizás. Tiene un libro... algo de la gratitud. Como véis, osado y audaz argonauta, los desvaríos no respetan suelo alguno.

Vidia: uno fue en susurros, o casi. Y créeme: me acordé de tu sugerencia.

Ángeles: ¡No puedo entrar a tu blog! Algo pasa. Entro y se enelentece, de manera que no te puedo dejar nada... ¿Seré el único?

Betty Boop: el mejor nombre para tí. Lejos. El mejor. Mejorsísimo. Abrazos y gracias por la visita.

Pedro: entrañable amigo, thanks. Nos vemos el miércoles, si el hado no dice otra cosa.

luciérnaga dijo...

Mahiakeff:
¡Por Dios que me hace reír Ud.!
Un abrazo.

L.

Blue Marble dijo...

Al leer ese poema tuve un deja vu de un soneto del maestro Quevedo:

Amor constante más allá de la muerte


Cerrar podrá mis ojos la postrera
sombra que me llevare el blanco día,
y podrá desatar esta alma mía
hora a su afán ansioso lisonjera;

mas no, de esotra parte, en la ribera,
dejará la memoria, en donde ardía:
nadar sabe mi llama la agua fría,
y perder el respeto a ley severa.

Alma a quien todo un dios prisión ha sido,
venas que humor a tanto fuego han dado,
medulas que han gloriosamente ardido:

su cuerpo dejará no su cuidado;
serán ceniza, mas tendrá sentido;
polvo serán, mas polvo enamorado.